Bueno, pues yo pensaba que el Sr. Durán i Lleida, después de sus comentarios contra los jornaleros en paro andaluces, ya no tenía en la recámara de la escopeta más improperios contra "los otros", "los diferentes", "los que no hablan igual", "los que no piensan igual" o "los que son más oscuros", pero he aquí que ahora va el buen señor y nos suelta otra lindeza de las suyas, a las que debemos ir acostumbrándonos pues parece ser que él es así.
Para José Antonio "la gente no abandona por ganas su pueblo". "Lo hace porque busca un paraíso mejor en sociedades desarrolladas". ¿Pero cree que lo hace porque le gustan los correbouts o los castellers? Yo creo que un emigrante busca, preferentemente, salvar la vida, y huye de zonas en conflicto buscando lugares más seguros, y en segundo lugar busca un espacio en el que poder establecerse con su familia y que no les falte el pan diario.
Yo me imagino que aquel grupo de francos que se estableció en el nordeste de Hispania (o España, que me da igual, oiga) allá por los inicios del siglo IX para formar un colchón, la Marca Hispánica germen de la actual región de Cataluña, que frenase a los árabes al pie de los Pirineos, no pensó en las tradiciones ni en la cultura del pueblo al que le usurpaba el territorio y ahora está pensando en quedárselo como propio para siempre. ¡Ay, ay, José Antonio, que ya me estás decepcionando mucho!
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