Ayer, día 25 de Mayo distintas agencias dieron la gran noticia: España ha obtenido este año 603 banderas azules, 511 en playas y 92 en puertos deportivos. Si los datos de la noticia los contabilizamos por número playas y por comunidades, Galicia, con 117, ocupa el primer lugar seguida de la Comunidad Valenciana con 104, Cataluña 86, Andalucía 66, Baleares 63, Canarias 35 y Asturias 17.
Si en lugar de contabilizarlas por playas lo hacemos por kilómetros de playa, la clasificación dará un vuelco, y así, Andalucía pasaría del cuarto lugar al primero con 112 kilómetros de playas con bandera azúl, y detrás la Comunidad Valenciana con 107 km, Cataluña 83 km, Galicia 35 km, Baleares 22 km, Canarias 12 km y Murcia 6,36 km.
El contraste entre kilómetros con bandera azúl y número de playas galardonadas es alto en algunos casos, aportando un dato que me llama la atención sobremanera, y es que dos comunidades, Baleares y Canarias, con un número de kilómetros de costa elevado, 1.428 y 1.683 respectivamente, apenas tienen banderas azules, representando éstas un 1,5% y 0,71 respectivamente de sus costas, mientras la Comunidad Valenciana, con una extensión de 518 km de costa, tiene 104 km de bandera azúl, un 20% de su total, Cataluña con 699 km de costa y 86 km de bandera azúl tiene un 12,3%, Andalucía con 945 km de costa y 112 km de bandera azúl tiene un 12%, mientras que Galicia, con 1.498 km de costa y 35 km de bandera azúl tendría un 2,33%. Visto así, la lectura de la noticia cambia.
Este montón de datos que os he dado ¿tendrá algo de utilidad? No lo sé; tan sólo lo he hecho porque esta mañana he visto, en el programa de "Las mañanas de la uno", cómo algunos presentadores se vanagloriaban de que en tal o cual comunidad había tantas o cuantas playas azules. Y, tras escucharlos, yo me pregunto: ¿Pero es tan bueno que nuestras playas sean bandera azúl?
Para conseguirlas, en primer lugar, el ayuntamiento en el que se encuentra ubicada la playa lo tiene que solicitar, y esto tras un gran desembolso económico. En segundo lugar, las condiciones para que te la concedan requieren numerosas obras de consolidación de estructuras, como servicios, duchas, papeleras, análisis aleatorios de la calidad de sus aguas, accesos, etc. Por mi cabeza no pasa que playas como, por poner un ejemplo, Barbate, en Cádiz, o la de Mónsul, en Cabo de Gata, tengan mucho que envidiar a playas con bandera azúl, al igual que los parques naturales canarios. Y el caso es que en esta comunidad, Canarias, con tan pocas playas azules, se baten récords de visitas turísticas.
Entonces tendremos que plantearnos, ¿habrá que añadir otra categoría como es la de Playas Vírgenes? Yo, personalmente, prefiero ir a una playa virgen, aunque no tenga bandera azúl, que a una playa galardonada con éste título en la que, para dirigirme al agua, tenga que ir esquivando sombrillas, toallas o hamacas.
Pero esto es cuestión de gustos.
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