bastón de roble, boina y un mostacho,
un chal de lana, moño encanecido,
rostros surcados, caminar cansino.
Ya les conocen el guardia uniformado,
los revoltosos críos colegiales
y hasta un ilustre señor pulido en mármol
que fue poeta, militar o fraile.
Y se les ve sentados en el parque,
de que hablarán si ya han hablado tanto,
si compartieron alcoba y destino
y hasta comieron los dos de un mismo plato.
Y en aquel banco que está junto a la fuente,
tienen su cita puntual con las palomas
que cuando llevan el pico rebosante
levantan vuelo, dejándoles a solas.
Pero esta historia no es nueva para ellos,
pues conocieron también otras palomas,
aquellas que engendraron y criaron
y que dejaron el materno nido en sombras.
Y se les ve sentados en el parque,
de que hablarán si ya han hablado tanto,
si compartieron alcoba y destino
y hasta comieron los dos de un mismo plato.
Pero al caer hojas de cualquier árbol
sabrán que es el otoño de sus vidas;
dirán adiós al parque compañero
y marcharán de la mano sin prisas.
Y se les ve sentados en el parque,
de que hablarán si ya han hablado tanto,
si compartieron alcoba y destino
y hasta comieron los dos de un mismo plato.
https://www.youtube.com/watch?v=IPm8rYPAKIM
Preciosa ¡¡¡¡¡¡¡¡¡
ResponderEliminar